Volvo ha presentado dos prototipos que muestran la nueva dirección emprendida por la marca sueca en el segmento de los vehículos compactos.

Los nuevos prototipos de la serie 40 muestran por primera vez los planes de expansión de Volvo en el mercado global de los vehículos Premium compactos, con una gama que combina un magnífico diseño exterior y un interior que incluye tecnologías avanzadas en materia de conectividad, electrificación y conducción autónoma.

Los nuevos prototipos serán los primeros que se construyan sobre la nueva plataforma de arquitectura modular compacta (CMA) de Volvo, que ha sido especialmente creada para vehículos compactos y permite a los diseñadores e ingenieros de la empresa explorar en nuevas direcciones.

Una estrategia para conseguir el mercado premium

La estrategia de Volvo para los vehículos compactos es una parte esencial de su transformación operativa y financiera global. La empresa sueca está implementando actualmente un ambicioso plan de revitalización que le permitirá competir en los próximos cuatro años, con sus adversarios Premium en el segmento compacto.

La nueva gama global de vehículos Volvo del segmento compacto incluirá una versión puramente eléctrica así como unidades con motor híbrido enchufable Twin Engine, siguiendo el compromiso de la compañía de electrificar toda su cartera de productos. Las previsiones de Volvo indican que en el año 2025 habrán vendido un millón de vehículos eléctricos en todo el mundo.

Aumento de ingresos

La empresa comunicó un aumento del 24 % de los ingresos durante los tres primeros meses del ejercicio hasta alcanzar los 41.700 millones de coronas suecas, lo que generó unos beneficios de explotación de 3100 millones y un margen de beneficios de explotación del 7,5 %. Las ventas globales durante el primer trimestre de 2016 aumentaron un 11,9 %, es decir, 120.591 vehículos. El objetivo de Volvo a medio plazo es vender 800.000 unidades al año, frente a las 503.000 de 2015.