Hyundai somete sus sistemas de movilidad eléctrica a temperaturas árticas para probar que funcionan de forma correcta. El centro de pruebas de la marca en Arjeplog, Suecia, a tan solo una hora en coche del Círculo Polar Ártico, es el lugar escogido para poner a punto sus modelos más limpios antes de salir al mercado.

El objetivo no es otro que afinar el comportamiento de los vehículos en invierno y optimizar cada uno de los elementos del sistema eléctrico, incluyendo la batería. Además, con ello se garantiza el buen funcionamiento de los dispositivos de arranque y que la autonomía no se vea resentida cuando el termómetro cae de manera drástica.

En estos test, los ingenieros o ingenieras de la compañía no sólo han trabajado para asegurar el funcionamiento del sistema eléctrico, sino también para afinar el rendimiento off road de dos vehículos llamados a ofrecer un alto nivel de prestaciones fuera de carretera.